Sostenibilidad

Plásticos reutilizables: Nuevas formas de hacer la compra

4 de mayo de 2023

Si has frecuentado algún supermercado, tienda de cosméticos, droguerías o cualquier tipo de comercio en estos últimos meses, puede que hayas empezado a notar un cambio en el envasado de muchos productos y alimentos. En concreto, los comerciantes están comenzando a dar un mayor y mejor uso a los envases reutilizables y, en muchas ocasiones, están incorporando nuevas instalaciones de refill que apuestan por la innovación y la tecnología para alargar la vida útil de los envases.

Este cambio no ha surgido de forma inesperada, ni porque todos los comercios hayan decidido ponerse de acuerdo para fomentar el uso de soluciones reutilizables. El nuevo Real Decreto 1055/2022 de envases y residuos de envases que entró en vigor el 28 de diciembre de 2022 está fomentando esta transformación en el paradigma legal y en el consumo de los envases, dando lugar a nuevas formas de hacer la compra en 2023, que años anteriores no podríamos haber imaginado.

Principalmente, este Real Decreto va a significar en los próximos meses:

El fomento del uso de envases reutilizables para el consumo de agua potable en espacios públicos a través de fuentes, a excepción de los espacios públicos sanitarios, donde se permitirá la comercialización de envases de un solo uso.
La ampliación de los tests y pruebas de calidad de los envases reutilizables, que tendrán en cuenta el ciclo de vida útil del envase, así como el tipo de material utilizado y el producto que está destinado a contener.
La prohibición de vender lotes de menos de 1,5 kg de fruta y verdura envasada. No obstante, las frutas y verduras podrán ser envasadas si pertenecen a alguna variedad protegida o registrada con algún certificado de calidad diferenciado, así como aquellas procedentes de la agricultura ecológica que, por ejemplo, pueden tener un mayor riesgo de deterioro.
La posibilidad de llevar envases reutilizables de casa para hacer la compra, facilitando un sistema de depósito, devolución, retorno y diferentes mecanismos para ello. De hecho, los comercios de al menos 400 metros cuadrados o más deben destinar un 20% del área de su local comercial a la venta de productos a granel o para fomentar el uso de envases reutilizables.

Sin embargo, todas las excepciones, particularidades y reglas deberán ser determinadas en un plazo de 6 meses desde la puesta en vigor del RD por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación junto al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico y en coordinación con la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición.

Una vez excedido este plazo de categorización y decisión, los comercios tendrán 6 meses más para adaptarse a estas medidas, con lo que, aunque experimentaremos un proceso de transformación en los establecimientos comerciales, no veremos aplicadas de forma plena todas estas reglas hasta 2024.

No obstante, cada vez más consumidores han comenzado a adoptar la rutina de utilizar envases reutilizables para hacer la compra en el supermercado, guardar cremas nuevas, o incluso para no tener que deshacerse de los elegantes frascos de perfumes y cosméticos una vez se hayan agotado.

Ante este cambio de paradigma, también diversas marcas y establecimientos han decidido apostar por innovar en la forma en la que presentan y trasladan sus productos al punto de venta y los hogares de todos aquellos compradores que, hartos de deshacerse todos los meses de los mismos recipientes y frascos una vez han sido consumidos, quieren adoptar un comportamiento más responsable, es decir, reducir la cantidad de residuos, adquiriendo envases más duraderos y reutilizables.

Pero ¿de qué están hechos estos envases reutilizables? ¿siguen siendo tan útiles y cómodos como los de un solo uso? ¿merece la pena utilizarlos?

¡Es la hora de averiguarlo!

Las ventajas de los envases reutilizables

Los envases reutilizables suponen una apuesta por un futuro cómodo y organizado, que beneficia tanto al fabricante, como al consumidor y al planeta, siempre y cuando no se ponga en riesgo la higiene y seguridad del consumidor.

En primer lugar, las marcas pueden reducir el uso de materias primas, ya que no sería necesario crear tantos nuevos envases, lo que supone un impacto muy positivo para el planeta.

En segundo lugar, los consumidores se benefician de no tener que pagar un coste extra por un envase que solo utilizarán en una ocasión. Por ejemplo, al comprar un frasco de perfume recargable, destinaríamos nuestra inversión al producto que verdaderamente queremos adquirir, en este caso a la fragancia, y no a su envoltorio. Además, tal y como hemos comentado, los envases reutilizables permitirán mantener una mejor calidad de vida al cuidar del entorno que nos rodea.

En definitiva, los envases recargables ayudan a reducir la cantidad de residuos generados. Sin embargo, para hacerlo de forma óptima y eficiente tenemos que recurrir a unos materiales fundamentales: los plásticos.

La buena noticia es que los plásticos son flexibles y versátiles. Por ello, se encuentran muy presentes en la industria del envase, pues sus cualidades son idóneas para favorecer la circularidad y la reutilización de forma sostenible y segura. De hecho, sin tener que renunciar a la calidad, los plásticos nos permiten reinventar los envases, aumentando la duración de sus ciclos de uso, e incluso fabricar otros envases reutilizables sostenibles, a través de la fabricación con materiales plásticos reciclados.

Cómo incorporar los envases reutilizables en nuestras vidas

Por todos estos motivos, el envasado reutilizable es una realidad cada vez más extendida en numerosos sectores que, decididos a innovar en los envases de sus productos, han dado con la clave para crear desde máscaras de pestañas refill, hasta bowls de comida take-away que puedes devolver tras consumirlos.

Existen distintos tipos de envases reutilizables: por un lado, aquellos pensados para ser utilizados con una segunda finalidad cuando ya han cubierto su propósito inicial. Es el caso de marcas como PUMA, que decidió crear un envase para zapatillas que se convirtiera en bolsa de poliéster reciclado. Esta innovación permitía a los consumidores reutilizar el packaging de sus zapatillas en numerosas ocasiones para llevar, guardar y trasladar objetos, permitiendo, a su vez, ahorrar a la marca 8.500 toneladas de papel.

Por otro lado, también encontramos los famosos envases recargables o refill, muy populares en el sector beauty.

¿Alguna vez te has parado a contar cuántas máscaras de pestañas habrás usado en la vida, porque el contenido se había acabado, aunque el pincel estuviera intacto?

La marca Kjaer Weis ha decidido poner fin a esto con un producto que contiene suficiente rímel como para 3 meses y, además, luego puede ser rellenado.

A su vez, otras marcas referentes en el sector como Sephora, ofrece numerosas opciones de refill en cremas y serums, como en esta crema de noche envasada en un recipiente recargable que cuenta con un práctico aplicador en la tapa, para hacer mucho más cómoda, rápida y placentera tu rutina de belleza antes de irte a dormir.

Su modo de empleo es muy sencillo: insertas el recipiente con la crema en el interior del envase, alineas el logotipo del recambio con el del recipiente exterior y lo deslizas hasta que escuches un ‘clic’ que no solo beneficiará a tu piel ¡sino también al planeta!

En definitiva, pintalabios, coloretes, bases de maquillaje y, actualmente, cualquier producto del sector cosmética puede ser rellenable y cada vez más marcas expertas en make-up apuestan por ello. No obstante, los fabricantes de perfumería no se quedan atrás ¿alguna vez has soñado con fuentes de perfume?, pues nos alegra comunicarte que tu sueño se ha hecho realidad con estos envases refill de Mugler:

Sin embargo, esto va más allá: los champús, geles de baño, detergentes, suavizantes, jabones para abrillantar y fregar nuestros utensilios de cocina, u otros productos de limpieza e higiene, suelen venir almacenados en envases de plástico que depositamos en los contenedores amarillos para su posterior reciclado. Por este motivo, han surgido compañías como We-Refill, que desde su filosofía «rethink, reuse, reduce», proporcionan estaciones de refill a diferentes locales y supermercados. Uno de ellos es LIDL, y en Reino Unido ya podemos rellenar los productos que necesitamos para hacer la colada en envases reutilizables como si se tratase de un refill de bebidas.

Por último, una de las recientes innovaciones en este tipo de envases son los circuitos cerrados, es decir, aquellas cadenas de suministro que permiten devolver los envases a las empresas, para que estas se encarguen de higienizarlos y otros consumidores puedan utilizarlos.

En Estados Unidos, Reino Unido, Japón y Francia, este tipo de ecosistemas “reuse, return, repeat” ya es una realidad gracias a plataformas como Loop, que trabaja con marcas líderes, tales como Burger King, Carrefour, Walmart y Tesco, para habilitar versiones recargables de sus productos convencionales de un solo uso (envases de café, botellas de champú, packagings de comida…) y favorecer su reutilización circular de forma sencilla, ¡compruébalo por ti mismo!

En el mercado español, comenzamos a encontrar este tipo de oportunidades a través de apps como Bumerang, que se dirige a bares y restaurantes con el lema “no dejes para mañana, lo que puedas mejorar hoy”, con un sistema de envases retornables, reutilizables y longevos, pues sus bowls permiten más de 200 usos y sus vasos hasta 500, siendo aptos para neveras, lavavajillas y microondas.

Y no podemos dejar pasar esta oportunidad para mencionar una de las herramientas que más apoyo y utilidad pueden dar a la hora de hablar de envases reutilizables al fijar requisitos mínimos que deben cumplir para que realmente tengan esa función y es la normalización. A día de hoy el comité de normalización de plásticos y caucho de UNE ha trabajado y continúa trabajando, junto con todos los agentes implicados, en normas de producto reutilizable como, por ejemplo, las bolsas de plástico reutilizables y con alto contenido en reciclado (UNE 53930-1y2), las cajas reutilizables para aplicación agrícola e industrial (UNE 53927) o la vajilla reutilizable (UNE 53928).

Como podemos observar, las opciones reutilizables son infinitas y cada vez más comunes a nivel global, pues diferentes sectores, marcas, plataformas y aplicaciones han decidido unir sus esfuerzos para convertir la durabilidad y la resistencia de los envases de plástico en una cualidad positiva y sostenible, ¡enfocada en mejorar nuestra rutina y calidad de vida!