Arte

Los plásticos están a la moda

24 de marzo de 2023

La moda no deja de evolucionar hacia formas, estilos, colores y materiales que se adaptan a los nuevos modos de vida y necesidades de la sociedad. Bolsos transparentes, joyas que nos recuerdan a las de nuestra infancia, o tacones de plástico con todo el glamour de los de cristal, pero tan ligeros que incluso Cenicienta los hubiese preferido, son algunas de las tendencias plásticas que protagonizan las últimas pasarelas.  

Pero ¿por qué el protagonista de todas estas tendencias es el plástico? La clave está en sus cualidades: es versátil, flexible, tiene una gran durabilidad y resulta muy sencillo de reciclar, propiedades que lo convierten en el material ideal para crear prendas diferentes y dejar volar nuestra imaginación. 

¡Echemos un vistazo! 

Vuelta a los 2000… ¡con las joyas de plástico!

¿Recuerdas esos veranos en la playa, montando joyitas y luciendo más pulseras de cuentas de colores que brazo? Pues se ha convertido en la nueva obsesión de la Generación Z. Los colores llamativos, las tallas XXL y las formas menos esperadas están llevando el plástico a otro nivel, en el que la nostalgia y la diversión han sustituido al minimalismo. 

Los collares y las pulseras de plástico son un must para darle vida a nuestros looks preferidos, pero si existiese una competición en la bisutería, los anillos de plástico, sin duda, se llevarían todos los premios. De hecho, las búsquedas de anillos de plástico comenzaron a experimentar un crecimiento a nivel internacional en 2021, así como las búsquedas de anillos de resina (un tipo de plástico), que se disparó en un 28%.

Esta popularidad no surgió de la nada. Como siempre, las celebrities e influencers dedicaron su empeño (y muchas publicaciones en Instagram) en volver a ponerlos de moda, tales como Dua Lipa Bella Hadid, y artistas nacionales como Miranda Makaroff, que los lucen siempre que tienen la ocasión. 

No obstante, los verdaderos protagonistas de esta gran tendencia han sido las pequeñas firmas que, con el objetivo de darle una nueva salida al plástico, han creado colecciones con diseños divertidos, vibrantes, atrevidos y sosteniblesMuchas de estas firmas tienen etiqueta “made in spain”, y su éxito es palpable en todos los países.

Una de esas “pequeñas” marcas (aunque de pequeña ya tiene más bien poco, pues a pesar de que tan solo lleve desde 2019 activa y se creara como el hobby de una chica barcelonesa de 21 años, las ventas de la firma ya alcanzan los 2,5 millones de euros), se denomina “La Manso” y es toda una máquina del tiempo hacia la década de los 90.

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Adriana Manso, su autora, se basó en 
los plásticos que la rodeaban durante esta época para crearla, tales como tamagotchis, tazos o muñecos de Playmobil. Sin embargo, su verdadera inspiración fue su abuela, una mujer con mucho estilo, tal y como reveló en su entrevista con Vogue: “La recuerdo siempre llena de bisutería ostentosa de plástico y el efecto que generaba eso en ella no era algo infantil, era muy sofisticado. Permitía en sus looks unas formas y volúmenes que solo este tipo de material genera”.

La marca comenzó recopilando plástico de diferentes fábricas nacionales para darles una segunda vida al crear lo que ella misma denomina como “lujo de plástico”, aunque también fabrican productos que no parten del plástico reutilizado, pues “transformar el plástico en una pieza pulida, brillante y resistente es pura artesanía. Si haces cosas para que dure siempre tiene un impacto medioambiental muy bajo”, afirma Adriana poniendo en valor la durabilidad que aporta el plástico a sus productos.

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En el plástico no hay secretos: bolsos y zapatos transparentes.

Un momento, ¿pensabas que solo los anillos de plástico estaban de moda? Otra de las tendencias que ha conseguido reforzar aún más la amistad del plástico y los accesorios han sido los bolsos PVC, también llamados los bolsos de los valientes o de aquellas personas que no tienen nada que esconder, ya que son completamente transparentes

Tote bags, bandoleras, shoppers, mochilas… cientos de formas, desde la más accesible de la mano de marcas como Zara, hasta la apuesta por bolsos de plástico de alta gama como algunos de Chanel o Burberry, donde solo un material es el protagonista: el vinilo brillante y traslúcido que, por si no te habías dado cuenta, ¡combina con todo!

 

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El estilo «callejero» o street style ha puesto estos bolsos PVC en tendencia, abriendo un nuevo sendero en la industria de la moda: la posibilidad de combinar y potenciar nuestros looks con objetos, posesiones y elementos no textiles. De esta manera, muchos iconos de la moda introducen y dejan a la vista de todos las libretas, recuerdos, carteras y gafas sin funda que sumen estilo al outfit, metiendo, por el contrario, todo lo que no quieren que se vea en un segundo bolsito, que también aporte un poco de color al interior de este elemento transparente.

 

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A estos accesorios transparentes se suman los famosos 
zapatos de PVC, caucho o acrílico, materiales que han desbancado a otros elementos como la piel. En este caso, el estilo callejero e informal también ha tenido mucho que ver, volviendo a poner de moda las crocs e inspirando a muchos diseñadores como, por ejemplo, Moschino, quien ha creado los zapatos «bubble wrap effect», imitando al plástico de burbujas que a todo el mundo le vuelve loco explotar (si lo pensamos bien, ¿qué material podría ser mejor para proteger nuestros pies?).No obstante, esta tendencia no solo está presente en las calles. El calzado de plástico también ha dejado huella en las alfombras rojas, sobre todo, en forma de tacón hecho de plástico. Un verdadero come back de los años 50 cuando los brillos de los colores vivos plasmados en vinilo, o los zapatos transparentes envueltos por brillantes y piedras preciosascausaban revuelo por todo Hollywood.

 

Modelo 1, ¡rótate y luce plástico!

Sin duda, el plástico ha vuelto más fuerte que nunca a la industria, y es que el sector textil se ha dado cuenta de que es el material idóneo para seguir innovando y creando diferentes formas, materiales y acabados, que aporten valor al creativo imaginario presente en la historia de la moda.

De hecho, grandes diseñadores ya han trasladado sus diseños a las pasarelas de la Fashion Week en diferentes países del mundo, uniendo dos elementos que conforman una tendencia única: tecnología y plástico. De esta forma, la marca francesa Coperni, ya conocida por sus creaciones impresas en 3D o sus diseños con estufas incorporadas, marcó un hito mágico en la Semana de la Moda de París, en octubre de 2022, creando un vestido en directo a través de un espray pulverizado sobre la modelo Bella Hadid. 

¿Adivináis de qué estaba compuesto? ¡Exacto! De fibras sintéticas, como el nailon y la celulosa, y una solución de algodón que, pulverizado sobre la piel de la modelo, daba forma a un elegante y minimalista vestido blanco.

 


Esta “milagrosa” prenda no hubiese sido posible sin 
la tecnología patentada por 
“Fabrican Sprayon fabric ©”, una empresa especializada en la investigación y ciencia de los materiales. La marca, colaboradora de la firma Coperniha descubierto una increíble solución para agilizar los procesos de fabricación de la industria textil, contribuyendo a su vez con la economía circular de los materiales, pues la prenda pulverizada, además de poderse lavar y volver a poner tantas veces como uno quiera, tiene la capacidad de volver a diluirse de nuevo, para crear vestidos en otros tipos de cuerpo en tan solo unos minutos.

 

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Sin duda, este viaje en el tiempo por el pasado, presente y futuro de las tendencias plásticas nos demuestra que este material seguirá siendo el protagonista de numerosas Fashion Weeks, Street styles y estilos vintage que marcarán los próximos años de la industria textil. 
 

¿La causa? La versatilidad de este material. El plástico puede pasar de decorar nuestras manos y convertirse en un nuevo bolso de confianza, a crear en cuestión de segundos un vestido a medida. Además, su durabilidad no solo nos permite reciclar otros materiales plásticos para convertirlos en prendas, o incluso diseños de plástico para crear otros estilos de ropa, sino que nos durará tanto como aquel valioso anillo de nuestra abuela, que llevamos guardando durante generaciones (¡con la ventaja de que no nos dará tanto miedo perderlo!).